¿Sabías que puedes plantar semillas en una esponja? Aprende cómo hacer esta divertida manualidad con los peques de la casa en este tutorial. 

Puedes usar semillas de césped o hacerlo aún más divertido plantando semillas de hierba comestible para gatos o roedores (¡existen!). Con este pequeño proyecto enseñarás a los más peques de la casa los conceptos más básicos de jardinería y los mantendrás entretenidos durante los días de verano. Requiere muy poco trabajo, es económica y muy fácil de mantener, dado que la hierba es muy resistente a casi todas las trastadas que los niños puedan hacerle (regar poco, regar demasiado, cortarla, arrancarla, etc).

casita hierba

¿Te animas? ¡Pues vamos a ello! 🙂

1. Materiales

  • 4 esponjas nuevas, si son de cocina no olvides quitarle la parte que rasca. Si las puedes conseguir de colores, más divertida quedará.  Las medidas deben ser aproximadamente de 10 cm por 6 cm.
  • Regla
  • Rotulador permanente
  • Tijeras con punta afilada
  • Fiambrera (o tupper) de tamaño grande
  • Pulverizador de agua
  • 1/2 Taza de semillas de césped, hierba para gatos o hierba para roedores.
  • Alfileres (opcional)

2. Paso a paso

  1. Para crear una buena superficie de cultivo, lava las esponjas bajo el grifo y escúrrelas un par de veces. Deja que las esponjas se sequen ligeramente.
  2. Con la regla y el rotulador permanente, dibuja la pared y formas del patio como se muestra en la imagen y luego córtalas.

piezas

* El tejado no lo cortes en dos partes, simplemente haz un corte que permita doblar la esponja, como si fuera de papel, así se aguantará solo. Fíjate en la imagen:

tejadocasita

 

Si es demasiado tarde y ya la has cortado, no te preocupes, usa los alfileres para unir las dos piezas.

 

3. Ahora monta la casita encima de la tapa de la fiambrera, encajando todas las piezas. Si quieres asegurarlas y que no se desmonte, puedes usar los alfileres

casitamontada

 

4. Rocía, pero no empapes, la casita con agua. Después espolvorea una capa generosa de semillas de manera uniforme sobre el techo y el jardín. Si las semillas se caen del techo, recógelas con las manos secas y vuélvelas a colocar en los agujeros. Por último, rocía un poco más de agua sobre las semillas, desde abajo hacia arriba.

5. Ahora tapa la casa con la fiambrera. Para que no se forme moho, puedes hacer un par de agujeros para que entre aire, o no taparla del todo.

6. Mantén la casita húmeda y con luz solar. En una semana verás los primeros brotes. Espera otra semana para hacer la primera poda, o bien espera a que la hierba crezca lo suficiente como para podarla. Si el clima no es muy seco, no hace falta que la vuelvas a tapar. Observa cómo se comportan los brotes y si necesitan más humedad.

7. Si has usado hierba para gatos o roedores, ya puedes darle su delicioso aperitivo.

 

Si consigues que los pequeños se interesen y la cuiden bien, esta casita puede durar varias semanas.

¡Esperamos que te haya gustado esta manualidad! Si te animas a probarla déjanos la foto del resultado en nuestro Facebook, queremos ver vuestros experimentos 🙂

Y si tienes alguna duda ya sabes que puedes dejarnos un comentario.

 

¡Gracias por leer! 😀